Categoría: Bitácora

  • ¿Comentarios?

    Mi blog siempre ha tenido el punto de interactividad básico de cualquier blog, que es un formulario de comentarios para cada uno de los posts. Pero también es verdad que la inmensa mayoría de los posts que tengo publicados no tienen ningún comentario. No me escuece, que conste; soy razonablemente consciente de la audiencia que llega a este sitio Web.

    Esto me hace plantearme si tiene sentido seguir teniendo un formulario de comentarios. Sigo dándole vueltas a si hacer una migración a un sitio Web estático; he seguido trabajando en ello y estoy bastante cerca de un resultado que me gusta, pero me sigue dando un poco de vértigo dejar de usar WordPress. Ya reflexioné en aquella nota sobre las implicaciones que tendría esa migración.

    En realidad no sé si quiero respuestas en mi sitio Web; nunca me lo he planteado pero, ahora que escribo sobre ello, no me terminan de parecer necesarias, sobre todo en mi caso que casi no las recibo (en blogs con mucho tráfico por supuesto que son interesantes para generar discusión). En todo caso quien me quiere decir algo dispone de otros muchos medios donde hacerlo (como el e-mail o algún perfil en redes sociales).

    La cuestión de las webmentions es semejante. No he tenido ninguna y yo he hecho alguna de casualidad cuando ha coincidido que he enlazado a algún post de algún blog que las admitía. Pero esas sí que no creo que las eche de menos.

  • #76: la FLAMA

    El hilo más necesario de todo Internet, al menos para los que vivimos en tierras calurosas, ya está en el fediverso. De este toot para abajo.

    Solo añado una apreciación respecto a los ventiladores que echan awita. Hace un par de años, en una casa que ya era húmeda de por sí (estaba por debajo del nivel de la calle y tenía paredes y bóvedas de ladrillo antiguo, por lo que chupaba agua por capilaridad a litros), se me ocurrió poner uno de estos para ver un rato la tele durante la siesta. Le eché agua y cubitos de hielo. Mientras el agua estaba fría, iba más o menos bien.

    Pero cuando el agua fría se templó, eso siguió echando agua, y aprendí a las malas que los refrigeradores de este tipo funcionan mejor cuando están cerca de una ventana abierta (algo que es incompatible con la flama casi por definición). La humedad aumenta la sensación de calor y eso todo lo que hacía era meter humedad y removerla por una habitación cerrada.

    Y me reafirmo: la mejor inversión que he hecho en mi casa no ha sido el aire acondicionado del despacho, sino el ventilador de techo del dormitorio.

  • #75

    No sé cuántos pantalones cortos de deporte de la marca Joma tengo en casa, pero me parecen la caña para verano. Fáciles de poner, cómodos, no dan calor, y habitualmente baratos (estos azules están hoy a 6€; link afiliado). Y los azules y amarillos me hacen parecer un concursante del Grand Prix del Verano, lo que también me parece positivo.

    Lo único que echo en falta es que no tienen ningún bolsillo. Pero como soy un hombre a una bandolera pegado tampoco es tanto problema.

    En su defecto me gustan también los shorts de baloncesto de Decathlon (los de su marca Tarmak). Y tengo unos de Uniqlo que son la caña, pero son algo más caros y además creo que ya no los tienen a la venta.

  • #74

    When I was 17, I wrote:

    «I’m going to admit that my content is not perfect, but I have fun writing it. I really do.»

    Let me add to that. I am going to admit that my code isn’t perfect, but I have fun writing it.

    The insecurities and joy of writing software (James’ Coffee Blog)
  • Mi café para este verano

    • Sacar un shot de café de una cápsula de Delta Q Menta y Chocolate, en un vaso lleno de hielo.
      • Alternativa que no requiere de la cápsula: servir un café cualquiera, caliente, en un vaso una cucharada de postre de helado de menta y chocolate, mezclar para que se derrita, y añadir al vaso lleno de hielo.
    • Poner a espumar suficiente leche, espumando siempre en frío.
    • Echar la espuma de leche en el vaso con hielo.

    Ea. Yo ya tengo bebida para este verano. No es un barraquito pero tampoco pasa nada.

  • Instalar Koreader en un Kobo

    Una nota que tenía pendiente escribir con detalle es la de cómo instalé Koreader en mi lector de libros electrónicos Kobo. Koreader es una aplicación para leer libros electrónicos disponible en cantidad de plataformas, configurable hasta la náusea.

    Pero en vez de escribirla yo os enlazo a esta nota de Rinzewind, donde lo explica en su caso (es el mismo método que utilicé yo para instalarlo).

    En general estoy muy contento, me da muchas opciones y la integración con Calibre es estupenda. Solo añado que si añades la familia de tipografías Vollkorn la experiencia de lectura mejora todavía más.